Los cambios experimentados en la industria automotriz derivados de la nueva organización del trabajo y la producción reflejan la transición del Fordismo al modelo Toyota. Sus vertientes nacionales han llevado a nuevas configuraciones en el despliegue territorial. En México, el cierre de las empresas armadoras Ford, Chrysler y General Motors en lo que fuera el Distrito Federal dio paso a nuevas localizaciones como el Occidente, el Bajío y el Norte del país. Sin embargo, quedaron importantes armadoras en la región centro en el Estado de México, Puebla y Morelos. Querétaro es una localización importante de la industria automotriz e interesante dado que no cuenta con una empresa armadora, quedando representada por el sector de autopartes. Las empresas con mejor posicionamiento en la cadena productiva son filiales de grandes compañías trasnacionales. El estudio de esta localización está basado en el levantamiento de encuestas entre las empresas de la rama donde se ha encontrado una estrecha relación entre la inversión extranjera directa y su origen, así como vinculación con armadoras de la misma procedencia.